Los comentarios privados del expresentador de la cadena lo mostraron haciendo aseveraciones ofensivas que iban más allá de lo que acostumbraba decir en su programa.
El día previo al inicio del juicio por difamación de Dominion Voting Systems contra Fox News en un tribunal de Delaware, el consejo directivo de Fox y altos ejecutivos hicieron un descubrimiento sorprendente que contribuyó a llegar al punto de quiebre entre la cadena y Tucker Carlson, una de sus mayores estrellas.
Mensajes privados enviados por Carlson, que habían sido editados en los documentos legales presentados, mostraban cómo hacía comentarios muy ofensivos y vulgares que rebasaban las opiniones provocadoras y a menudo racistas expresadas en su programa de horario estelar y de todo lo revelado antes del juicio.
A pesar del hecho de que los abogados de Fox tuvieron esos mensajes durante meses, el consejo directivo y algunos altos ejecutivos apenas se enteraban sobre los detalles, lo que desencadenó una crisis en el más alto nivel de la compañía, según dos personas con conocimiento de las discusiones.
Dicho descubrimiento incrementó la presión sobre el liderazgo de Fox conforme buscaba encontrar una manera de evitar un juicio en el que Carlson (además de otras personas en la cadena) sería interrogado sobre el contenido de los mensajes privados que intercambiaron tras las elecciones presidenciales de 2020.
Dos días después de que el consejo se enterara, Fox llegó a un acuerdo en el caso por 787,5 millones de dólares, que se cree que es la cifra más alta en un juicio por difamación.
Varias personas con conocimiento de las discusiones de Fox relataron que los mensajes editados fueron un catalizador para una de las decisiones más trascendentales que la empresa y sus líderes (el equipo integrado por Rupert y Lachlan Murdoch, padre e hijo) habían tomado en años: cortar lazos con el conductor de su programa de horario estelar con mayor índice de audiencia y altamente rentable, así como un rostro de la cadena en la era de Trump.
La empresa lo despidió el lunes mediante una llamada telefónica de Suzanne Scott, la directora ejecutiva de Fox News Media.
Al final, según una de las personas que conocen las discusiones internas, Lachlan Murdoch consideró la salida de Carlson como una “decisión de negocios”, al igual que llegar a un acuerdo con Dominion.
Fox no hizo comentarios más allá de su comunicado inicial en el que anunció: “Fox News Media y Tucker Carlson han acordado tomar caminos distintos”.
Carlson y Bryan Freedman, un abogado que lo representa, no respondieron a las solicitudes para hacer comentarios. El miércoles por la noche, Carlson publicó un video en Twitter, hablando públicamente por primera vez desde que fue expulsado. Carlson no se refirió a su salida de Fox, pero criticó los debates “completamente irrelevantes” en la televisión y dijo: “Tanto los partidos políticos como sus donantes han llegado a un consenso sobre lo que los beneficia y se confabulan activamente para cerrar cualquier conversación al respecto”.
Y agregó: “Cuando las personas honestas dicen la verdad, con calma y sin vergüenza, se vuelven poderosas. Al mismo tiempo, los mentirosos que han estado tratando de silenciarlos se encogen. Se vuelven más débiles”.
No está claro por qué la junta directiva de Fox y otros ejecutivos no supieron sobre el contenido de los mensajes editados apenas hasta antes del juicio, el cual se centró en si Fox News había difundido con conocimiento afirmaciones falsas sobre Dominion y sus máquinas para votar después de las elecciones de 2020. Las partes sin editar de los documentos, incluidas algunas en las que Carlson se burló del expresidente Donald Trump, fueron ampliamente difundidas en las semanas previas al juicio.
La junta consideró usar un bufete de abogados externo para investigar al popular presentador, preocupada por el daño que el comportamiento de Carlson podría causar incluso más allá del caso Dominion, dijeron las dos personas.
Para cuando la junta vio el material redactado, Lachlan Murdoch ya estaba tratando de llegar a un arreglo extrajudicial con Dominion, después de haber dado a sus negociadores el visto bueno para aumentar la oferta de Fox a la compañía, según una de las personas informadas sobre las discusiones.
Ejecutivos de la compañía han indicado que una variedad de factores influyó en la decisión de despedir a Carlson después de que Fox lo respaldó durante años mientras él provocaba protestas y boicots de anunciantes por traficar con teorías de conspiración y narrativas de agravios a los blancos. Sin embargo, reconocieron que el descubrimiento del contenido de los mensajes de texto fue un factor importante en la decisión de despedirlo.
El papel que los mensajes, producidos en el proceso de descubrimiento de Dominion, desempeñaron en el fin de la carrera de Carlson en Fox demuestra la gravedad del daño que la demanda infligió a la empresa. Fox fue golpeada repetidamente por revelaciones dañinas mientras se dirigía al juicio. Si se hubiera resuelto mucho antes en el proceso, la empresa podría haber evitado tener que entregar los mensajes de Carlson y los de otros, incluso de las cuentas personales de ambos Murdoch.
En los últimos dos años, la paciencia de los Murdoch comenzó a agotarse, aseguran personas familiarizadas con sus quejas. Carlson surgió como una figura casi inexplicable que provocó nuevos dolores de cabeza con la programación de teorías de la conspiración que incluía mostrar de manera falsa el ataque del 6 de enero de 2021 al Capitolio como un acto quizás orquestado por el gobierno federal. Luego, cuando el caso de Dominion se dirigía a juicio, le dijo a su audiencia el mes pasado que los disturbios eran, de hecho, un ejercicio pacífico, para lo que utilizó imágenes de videos seguridad que el presidente republicano de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, le había dado exclusivamente a él.
Aunque las declaraciones hechas en su programa solo representaron una pequeña parte de la demanda de Dominion, las revelaciones relacionadas con sus mensajes asumieron un papel enorme y se sumaron a los problemas de relaciones públicas de la empresa.
Es notable que incluso cuando se compara con la retórica extrema que a Carlson le permitieron usar al aire, los mensajes divulgados tuvieron la capacidad de impactar. En uno, se refirió a la abogada Sidney Powell, una de las principales impulsoras de la teoría desacreditada de que las máquinas de Dominion cambiaron votos, con un insulto vulgar y misógino. En medio del conjunto de mensajes editados, había uno en el que usó una vulgaridad similar para describir a un alto ejecutivo de Fox News, informó The Wall Street Journal el miércoles.
Una persona informada del contenido del material señaló que uno de los mensajes era en particular ofensivo, lo que se sumó a las preocupaciones en la cúpula de la compañía. The New York Times no ha visto el contenido de ese mensaje.
Los abogados de Dominion planeaban presionar al juez sobre usar el contenido de los mensajes editados en su interrogatorio a Carlson. Los abogados prepararon decenas de preguntas potenciales para el conductor, junto a réplicas hipotéticas que pensaron que Carlson podría usar para desviar las más contundentes. Además, planeaban ser más duros respecto a los mensajes que eran más degradantes hacia las mujeres. Ambas partes tenían puntos de vista diferentes sobre si muchos o alguno de los mensajes no editados de Carlson se verían en la corte (una diferencia que, en el juicio, habría sido resuelta por el juez que presidía el proceso, Eric M. Davis, del Tribunal Superior de Delaware).
No obstante, el acuerdo del caso de Dominion no ha puesto fin a la amenaza que representan los mensajes. El Times, The Associated Press y National Public Radio contendieron las ediciones, lo que significa que todavía podrían volverse públicos.
Además, la indiscreción de Carlson lo ha expuesto todavía más. Dado lo polarizante que ha sido, tanto al interior como al exterior de Fox News, más evidencia de conductas vergonzosas e inapropiadas podría surgir. Por ejemplo, en un video obtenido por el Times, se ve a Carlson fuera de cuadro conversando sobre sus “admiradoras posmenopáusicas” y si aprobarían cómo luce él al aire. En otro video, se le escucha describiendo a una mujer que él considera “sabrosa”.
Sus mensajes también podrían ser un factor en una demanda por difamación pendiente que la compañía de software Smartmatic (que con frecuencia es mencionada junto a Dominion en las versiones más descabelladas de la teoría de conspiración de la elección robada) presentó contra Fox, así como en otra demanda iniciada por una ex productora de Carlson, Abby Grossberg, quien alega un ambiente laboral hostil y discriminatorio.
Todo esto estaba sucediendo cuando la cadena finalmente eliminó el programa de Carlson esta semana, según varias personas familiarizadas con las discusiones internas. Y, el final de su carrera siguió un patrón.
Su partida sin ceremonias convirtió a Carlson en el último de una lista de anfitriones y ejecutivos destacados que Fox decidió hacer a un lado una vez que los Murdoch llegaron a la conclusión de que ya no valían la pena: Glenn Beck (2011), Sarah Palin (2013), Roger Ailes, cofundador del medio (2016) y Bill O’Reilly (2017).
A pesar de la influencia política que podía ejercer y el dinero que su programa de mayor audiencia aportó a la cadena, en última instancia, Carlson tuvo que reconocer que estaba al servicio de los Murdoch.
TNYT
