BEIJING (AP) — El presidente de China, Xi Jinping, llamó el jueves a reanudar conversaciones de paz en Ucrania, después que su contraparte francés Emmanuel Macron le pidiera que le “devuelva la cordura a Rusia”. Sin embargo, Xi no dio el menor indicio de que Beijing utilizaría su influencia como socio diplomático de Vladimir Putin para presionar a favor de una solución.
Xi no dio señales de que China —que antes de la invasión había declarado que tenía una “amistad sin límites” con Moscú— haya cambiado de posición desde que llamó a realizar conversaciones de paz en febrero, pero reiteró su llamado en un evento con Macron frente a la prensa. “Las conversaciones de paz deberían reanudarse lo antes posible”, dijo Xi.
Beijing, que considera a Moscú un socio en la oposición al dominio estadounidense sobre los asuntos globales, ha tratado de mantener una apariencia de neutralidad en el conflicto, pero le ha dado a Putin apoyo diplomático y ha repetido los argumentos con los que Rusia justificó la invasión de febrero de 2022. Xi recibió una cálida bienvenida en su visita a Moscú el mes pasado que le dio al aislado presidente ruso un estímulo político.
El presidente chino dijo que se deben tener en cuenta “los intereses legítimos de seguridad de todas las partes”, una alusión al argumento de Moscú de que su invasión de Ucrania se justifica debido a la expansión hacia el este de la OTAN, la alianza militar de Estados Unidos y varias naciones europeas.
Los gobiernos deberían “evitar tomar medidas que deterioren aún más la crisis o hagan que esta escape de todo control”, declaró Xi. Pidió cooperación para reducir los trastornos al suministro de alimentos y energía, sobre todo para los países en desarrollo.
Previamente, Macron pidió a Xi que “devuelva la cordura a Rusia y haga que todos regresen a la mesa de negociaciones”.
Macron destacó que China apoya la Carta de las Naciones Unidas, que exige respeto por la integridad territorial de los países. Dijo que el anuncio de Putin de que instalará armas nucleares en Bielorrusia viola acuerdos internacionales y compromisos que asumió con el gobierno de Xi.
“Necesitamos hallar una paz duradera”, afirmó el presidente francés. “Creo que esto también es importante para China, como lo es para Francia y para Europa”.
Macron estuvo acompañado por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en una muestra de unidad europea en las relaciones con el gigante asiático.
El gobierno de Xi considera a Rusia como una fuente de energía y un socio frente a lo que ambos califican como el dominio estadounidense en asuntos internacionales.
China es el mayor comprador de petróleo y gas ruso, lo que refuerza los ingresos del Kremlin frente a las sanciones occidentales. Esto incrementa la influencia de su país, pero Xi parece reacio a arriesgar esa alianza presionando a Putin.
Por otra parte, los 31 países de la OTAN advirtieron el miércoles de “graves consecuencias” si China empieza a vender armas y munición a Rusia. El secretario general de la Alianza, Jens Stoltenberg, apuntó que dar “ayuda letal” sería un “error histórico” y advirtió de que habría “graves consecuencias”, pero rechazó dar más detalles.