Rusia reaccionó este miércoles a la futura llegada de carros de combate occidentales a Ucrania con acusaciones hacia los aliados de Kyiv de agredir a Rusia y con convicción de la superioridad de los tanques rusos.
Occidente no está interesado en una solución diplomática «Esta decisión extremadamente peligrosa lleva el conflicto a un nuevo nivel de confrontación y contradice las declaraciones de los políticos alemanes. Alemania, al igual que sus aliados más cercanos, no está interesada en una solución diplomática de la crisis ucraniana, está dispuesta a su escalada permanente y al bombeo ilimitado de nuevas armas letales al régimen de Kyiv», dice el comunicado, firmado por el embajador ruso, Serguéi Necháyev.
El diplomático también sacó a relucir la historia pasada común. «La elección de Berlín significa el rechazo final de la República Federal de Alemania a reconocer su responsabilidad histórica ante nuestro pueblo por los terribles crímenes del nazismo durante la Gran Guerra Patria, olvidando el difícil camino de la reconciliación de posguerra entre rusos y alemanes», aseguró.
«Enviarán otra vez tanques de batalla con cruces alemanas al ‘frente oriental’, lo que inevitablemente provocará muertes no sólo de soldados rusos, sino también de población civil», terminó.
El martes Alemania cedió a la presión de los aliados y aceptó enviar tanques Leopard 2 propios a Ucrania. A cambio se supo que Estados Unidos, por su parte, despachará a Kyiv tanques estadounidenses Abrams.
Dimitri Peskov, jefe de prensa del presidente ruso, Vladímir Putin, dijo este miércoles que la idea occidental de que hay que armar a Ucrania para alcanzar la paz no tiene sentido.
«Vemos muchas declaraciones de convicción de un numero de políticos, expertos, militares, etc., que creen que la seguridad en el continente se puede asegurar continuando la guerra. Esta es una creencia absurda, es un callejón sin salida para el desarrollo de las ideas, tanto militares como políticas», dijo el portavoz del Kremlin.
«Estábamos convencidos de esto hace un año, e incluso hace poco más de un año, cuando el presidente Putin llamó a todos a sentarse a la mesa de negociaciones y a discutir nuestras preocupaciones, cuando el presidente Putin llamó a todos a recordar varias décadas de ofensiva gradual de la OTAN hacia Rusia, y cuando Putin advirtió que la continuación de esta línea no podía quedar sin consecuencias», prosiguió.