El presidente del comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, Mike Turner, ha emitido este miércoles un comunicado tan críptico como inquietante, y que ha sembrado la inquietud en Washington: su comisión ha comunicado a los legisladores en el Congreso información sobre una “amenaza de seguridad nacional grave”, sin especificar su naturaleza. Medios estadounidenses aseguran que la cuestión está relacionada con Rusia. Turner ha pedido que se desclasifique toda la información relacionada con el caso, para “poder abordar abiertamente las acciones necesarias para responder a esta amenaza”, mientras otros diputados han advertido que no es necesario perder la calma.
En una rueda de prensa en la Casa Blanca para tratar sobre los fondos de ayuda a Ucrania, el consejero de Seguridad Nacional, Jake Sullivan, ha apuntado que ya tenía prevista el jueves una reunión con Turner y otros altos responsables de inteligencia en el Congreso, en la que se abordará el asunto. “Llevaba tiempo programada, así que me sorprende que el presidente del comité haya planteado la cuestión en público antes de una reunión conmigo, con los responsables de Defensa y de Inteligencia”, ha comentado.
Varios medios estadounidenses aseguran que la inteligencia tiene que ver con el interés de Rusia en colocar un arma nuclear en el espacio. Según la cadena de televisión ABC, la idea no sería atacar la Tierra desde allí, sino utilizarla contra satélites artificiales. “Es algo muy preocupante y muy sensible”, ha asegurado una de sus fuentes. El periódico The New York Times apunta por su parte que esa tecnología “aún está en desarrollo y Rusia no la ha desplegado. Por tanto, no representa una amenaza urgente contra Estados Unidos, Ucrania o los aliados europeos de EE UU”.
“Solicito que el presidente Biden desclasifique toda la información relacionada con esta amenaza, de modo que el Congreso, la Administración y nuestros aliados puedan abordar abiertamente las acciones necesarias para responder a esta amenaza”, señalaba Turner, que no ha aportado más información.El comunicado del presidente del comité de Inteligencia llega cuando el mundo político estadounidense se encuentra inmerso en un intenso debate sobre cómo responder a la amenaza que representan rivales como Rusia y otros países autoritarios. El expresidente Donald Trump, previsible candidato presidencial republicano en las elecciones de noviembre, defiende una política aislacionista y el fin de semana pasado apuntaba que desdeñaría la obligación del auxilio mutuo, el principio en el que se basa la OTAN, si Rusia ataca alguno de los países miembros que no gasten el 2% de su PIB en Defensa. Trump también se ha declarado en contra de toda ayuda al extranjero que no sea en forma de préstamos.
El presidente estadounidense, Joe Biden, ha calificado las declaraciones de Trump de “estúpidas” y “peligrosas”. El demócrata defiende la implicación global de Estados Unidos como necesaria para la seguridad nacional de la primera economía del mundo. Y parte de esa implicación pasa por mantener la ayuda económica y militar a Ucrania en su lucha contra la invasión rusa. Su Administración reclama a la Cámara de Representantes que apruebe el proyecto de ley de 95.000 millones de dólares en asistencia a Ucrania, Israel y Taiwán, que el martes recibió el visto bueno del Senado; argumenta para ello que una derrota de Kiev alentaría a Moscú a otras agresiones contra países aliados de EE UU.
En un comunicado conjunto, los senadores demócrata y republicano de mayor rango en el Comité de Inteligencia de la Cámara Alta, Mark Warner y Marco Rubio, respectivamente, han indicado que su comisión tiene acceso a los datos de inteligencia de los que ha hablado Turner y que han seguido los acontecimientos “rigurosamente”. Como otros legisladores, han lanzado un llamamiento a la tranquilidad y la cautela.
“Seguimos tratando este asunto de manera seria y tratamos con la Administración sobre la respuesta adecuada. Mientras tanto, debemos tener cuidado con la posibilidad de divulgar fuentes y métodos que puedan ser claves para proteger una serie de opciones para la acción estadounidense”, indican Warner y Rubio. La agencia Reuters, que cita a una fuente familiarizada con el asunto, revela que ambos senadores fueron informados sobre la amenaza hace dos semanas.
El legislador demócrata de mayor rango en el comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, Jim Himes, ha puntualizado que las denuncias planteadas en el comunicado de Turner son significativas “pero no un motivo para el pánico”. “Acerca de si se puede desclasificar el asunto, es un debate que merece la pena tener, pero no en público”, agrega.
Varios medios estadounidenses aseguran que la inteligencia tiene que ver con el interés de Rusia en colocar un arma nuclear en el espacio. Según la cadena de televisión ABC, la idea no sería atacar la Tierra desde allí, sino utilizarla contra satélites artificiales. “Es algo muy preocupante y muy sensible”, ha asegurado una de sus fuentes. El periódico The New York Times apunta por su parte que esa tecnología “aún está en desarrollo y Rusia no la ha desplegado. Por tanto, no representa una amenaza urgente contra Estados Unidos, Ucrania o los aliados europeos de EE UU”.
“Solicito que el presidente Biden desclasifique toda la información relacionada con esta amenaza, de modo que el Congreso, la Administración y nuestros aliados puedan abordar abiertamente las acciones necesarias para responder a esta amenaza”, señalaba Turner, que no ha aportado más información.
El comunicado del presidente del comité de Inteligencia llega cuando el mundo político estadounidense se encuentra inmerso en un intenso debate sobre cómo responder a la amenaza que representan rivales como Rusia y otros países autoritarios. El expresidente Donald Trump, previsible candidato presidencial republicano en las elecciones de noviembre, defiende una política aislacionista y el fin de semana pasado apuntaba que desdeñaría la obligación del auxilio mutuo, el principio en el que se basa la OTAN, si Rusia ataca alguno de los países miembros que no gasten el 2% de su PIB en Defensa. Trump también se ha declarado en contra de toda ayuda al extranjero que no sea en forma de préstamos.
Por contra, el presidente estadounidense, Joe Biden, ha calificado las declaraciones de Trump de “estúpidas” y “peligrosas”. El demócrata defiende la implicación global de Estados Unidos como necesaria para la seguridad nacional de la primera economía del mundo. Y parte de esa implicación pasa por mantener la ayuda económica y militar a Ucrania en su lucha contra la invasión rusa. Su Administración reclama a la Cámara de Representantes que apruebe el proyecto de ley de 95.000 millones de dólares en asistencia a Ucrania, Israel y Taiwán, que el martes recibió el visto bueno del Senado; argumenta para ello que una derrota de Kiev alentaría a Moscú a otras agresiones contra países aliados de EE UU.