El programa Ilusiones y Poesía del domingo 6 de octubre del 2024 fue dedicado a Salvador Federico Valverde López Bailly, destacado escritor, poeta, periodista, de ascendencia española, que ha sido despojado de su obra, olvidado, hacemos un acto de justicia para reconocer a un autor que fue prácticamente borrado en España desde el final de la guerra civil, como si jamás hubiera existido. Gracias a Carlos Márquez por darnos a conocer a un artista de la estatura de Salvador Valverde!
Las poesias de María Teresa Ayllón, Simeón Arredondo, Lorenzo Araujo, Malú Brao, Arelis Albino Díaz engalanaron el programa y aportes sobre la copla española, el flamenco, la lira, el arte mayor y menor en la poesía, el fandango y el soneto, lo que nos invita a realizar un programa sobre la historia de la copla proximamente.
El 4 de abril de 1989 el periódico El País, publica una carta de Salvador Valverde Calvo, su hijo, donde solicita su colaboración para terminar con la muerte civil de su padre.
«Su condición de republicano y el hecho de que tomara el camino del exilio en 1939, radicándose en Argentina, podría considerarse razón para que durante el franquismo los locutores de radio, cada vez que transmitían una de sus canciones, omitieran su nombre. Pero lo que resulta incomprensible es que con la consolidación de la democracia esa muerte civil se perpetúe»
Tan solo quiere que se respete la autoría de sus obras que han sido atribuidas a otras personas.
Salvador Valverde nació en Buenos Aires, el 10 de enero de 1895, su padre se traslada a España, donde fallece, cuenta apenas el niño Salvador con cuatro años y su madre Isabel, tres años después,muere también, con apenas 36 años, quedando él y su hermana Isabel al cuidado de su tío José Valverde.
Salvador mostró un talento innato para la escritura y la composición musical desde muy joven, a los diecisiete años, ya había escrito ocho cuadernillos y publicado su primera novela, «Sol de la tarde», en 1916. Además, incursionó en diversos géneros literarios y artísticos, como poesía, cuentos, comedias, zarzuelas, operetas, guiones de películas, programas de radio y televisión.
A pesar de haber finalizado sus estudios de magisterio, Salvador nunca ejerció como maestro, ya que su verdadera pasión residía en la escritura y la creación artística. Su profunda conexión con Sevilla, y la influencia del modernismo y de poetas como Rubén Darío marcaron su estilo literario y musical.
Se dirige a Madrid en busca de nuevas oportunidades allí se consolida como periodista, escritor y compositor. En la capital española, tuvo la oportunidad de frecuentar círculos literarios y cinematográficos, ampliando así su red de contactos y su experiencia profesional.
Uno de los momentos clave en la carrera de Salvador Valverde fue el encuentro con la cancionista italiana Olimpia D’Avigny en 1920, quien lo inspiró a escribir su primera canción. Bajo el seudónimo de Pandolfo, comenzó a componer temas que pronto se popularizaron entre las cupletistas de España, estableciendo su reputación como compositor.
La colaboración con el músico sevillano Manuel Font de Anta en 1921 dio lugar a la creación de grandes éxitos musicales, que consolidaron aún más su carrera en el mundo de la música popular andaluza como «¡Oh, el campo!» y «Esperame en Sakuska», «Varita de nardo».
Salvador Valverde López Bailly continuó expandiendo su talento y su carrera en los años 20, centrándose ahora en el teatro y en la creación de zarzuelas que capturaban la esencia del ambiente andaluz:
- «La Virgen del Rocío» fue su primera zarzuela, con música de María Rodrigo, y en 1922 estrena en el Teatro San Fernando en Sevilla la zarzuela en dos actos,«Al niño mudo» y «El alma de la copla», «Gitanas del Sacromonte», expresan su versatilidad como autor y su habilidad para plasmar la cultura y la música andaluza en sus obras teatrales.
En Teatro estrena «La Corte del Rey Poeta» (Romea de Madrid, 1925, música de Lloret y Muñoa, 300 representaciones), «La novela de la playa» (1926, Romea, música de Lloret y Muñoa) y «Feria de Abril en Sevilla» (1927, Romea, música: E.de la Torre y Miranda).
- Sus temas fueron cantados por estrellas de la época como Goya, Amalia Molina, Pastora Imperio, Paquita Escribano, Salud Ruiz, Carmen Flores, Mercedes Seros, Dora La Cordobesita y Teresita España, «La Cruz de Mayo» «Mañana de niebla», con música de Francisco Sanna «La rifa del beso» y «Prisionera» entre otras.
- Su obra literaria y musical pronto atrajo la atención de importantes revistas y diarios de la época, como «Blanco y Negro», «ABC» y «Nuevo Mundo», donde se publicaron algunos de sus poemas y escritos.
Su labor periodística en «El Liberal» complementaba su prolífica carrera artística. La década de los años 20 fue sin duda un periodo de gran creatividad y éxito para Salvador Valverde López Bailly, consolidando su posición como una figura destacada en la escena cultural de la época.
Al trasladarse a Madrid, al comienzo de la década de los treinta, comenzó su colaboración con León y Quiroga, escribiendo con ellos centenares de canciones tan populares como Ojos verdes, María de la 0, María Magdalena, Ay, Maricruz, Triniá, Llora la guitarra, Soleá, etcétera.
¡Calle de la Veracruz!, aquí te lancé el ultraje
y aquí corte yo su vida, un Jueves Santo en la tarde.
Vengo de cumplir condena, calle que fuiste mi calle.
Calle del único amor que ha conocido mi sangre.
Vuelven mis ojos a verte tras de diez años de cárcel.
…
Adiós a Romero de Torres»,
«Vaya usted con Dios»,
Huyendo del régimen de Franco se va a Barcelona y gracias a su nacionalidad argentina, se salvó de ser enviado a un campo de concentración, se reúne con su esposa e hijo en Orleans, la familia se trasladó a París y desde Burdeos embarcan en el trasatlántico francés «Massilia» con destino a Buenos Aires.
Después de sortear la persecución de submarinos alemanes en el Atlántico Sur, el «Massilia» llegó finalmente a Buenos Aires el 5 de noviembre de 1939, permitiendo a Salvador Valverde y su familia iniciar una nueva vida en Argentina luego de su dramática huida de la guerra civil española.
En Argentina, Salvador Valverde compuso más de 200 canciones, algunas tan populares como Castillito de arena y Si vas a Calatayud, con Ramón Zarzoso.
Su legado artístico perdura hasta hoy, siendo reconocido por su contribución a la cultura española y latinoamericana.
La vida y obra de Salvador Valverde López Bailly es un testimonio del talento y la pasión que dedicó a su arte, dejando un legado artístico que sigue siendo apreciado y recordado hasta el día de hoy.
Valverde falleció en Buenos Aires, el 5 de agosto de 1975
https://www.youtube.com/live/ddUs1-pZowE.
