China condenó ayer la decisión adoptada por Estados Unidos de enviar las controvertidas bombas de racimo a Ucrania. Desde Beijing aseguran que esto podría causar problemas humanitarios.
Al ser consultada en una conferencia de prensa por la agencia TASS sobre esta decisión que aprobó Biden, la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de China, Mao Ning destacó: «China ha observado que la correspondiente decisión de EE.UU. ha causado una amplia preocupación en la comunidad internacional. Muchos países han expresado explícitamente su oposición a esto. La entrega irresponsable de municiones de racimo podría causar fácilmente problemas humanitarios».
Asimismo, señaló que China siempre cree que el diálogo y las negociaciones son la única salida posible a la crisis de Ucrania. «Las partes relevantes no deben echar leña al fuego para evitar agravar las contradicciones y escalar la crisis ucraniana», agregó Mao Ning.
Recordemos que fue el pasado viernes cuando se conoció que el gobierno de EE.UU., aprobó un nuevo paquete de ayuda militar para Ucrania. El paquete número 42, está valorado en 800 millones de dólares e incluye «cientos de miles» de bombas de racimo entre abundante munición de artillería y blindados.
Tras el polémico anuncio, se pronunció Biden al respecto, asegurando que para él fue una «decisión difícil».
Sin embargo, expresó que se convenció de enviar las controvertidas armas, que están prohibidas en más de 120 países porque, según él, Kiev necesita municiones en su contraofensiva contra Rusia.
«Esta es una guerra relacionada con las municiones. Y se están quedando sin esa munición, y nos estamos quedando sin ella», explicó Biden a CNN.
Desde Moscú señalaron que la decisión de Washington de suministrar bombas de racimo a Kiev es «un gesto de desesperación y una muestra de impotencia».
Según la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, la decisión de EE.UU. no es más que:
«Un intento cínico de prolongar la agonía de las actuales autoridades ucranianas sin tener en cuenta las víctimas civiles».