PARÍS (AP) — Francia y Alemania trataban de superar diferencias que la guerra de Rusia en Ucrania ha dejado a la vista y reforzar su alianza con un día de ceremonias y reuniones el domingo sobre seguridad, energía y otros desafíos de Europa.
Todo el gobierno alemán viajó a París para celebrar reuniones conjuntas y 300 parlamentarios de ambos países se congregaron en la Universidad de la Sorbona para conmemorar los 60 años desde el histórico tratado que selló un lazo entre dos viejos enemigos que ahora son el eje central de la Unión Europea.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, y el canciller de Alemania, Olaf Scholz, supervisarían dos rondas de conversaciones en el Palacio del Elíseo y se centrarían primero en política energética y económica y después en defensa.
Una gran prioridad, según funcionarios franceses y alemanes de alto nivel, era determinar la respuesta europea a los subsidios en Estados Unidos para fabricantes de autos eléctricos y otros negocios introducidos por la Ley de Reducción de Inflación del gobierno de Biden.
Francia quiere que Europa responda a lo que considera una medida injusta de Washington. París presiona para que la UE relaje las normas de subsidios estatales para acelerar su aprobación, simplificar el apoyo comunitario a las inversiones y crear un fondo soberano europeo para impulsar las industrias respetuosas con el medio ambiente. Berlín, en cambio, advierte en contra del proteccionismo.
En defensa, se esperaba que los dos vecinos hablaran de su ayuda militar a Ucrania, según funcionarios franceses y alemanes que no estaban autorizados a dar su nombre de acuerdo a las políticas de su gobierno.
Los dos países han hecho contribuciones considerables de armamento, pero Ucrania ha pedido tanques y armes más potentes conforme se alarga la guerra.
El conflicto ha dejado al descubierto las diferencias estratégicas entre los dos países, especialmente en cuanto a cómo abordar la crisis energética y la asfixiante inflación provocadas por la guerra, así como en inversión militar futura.
La cumbre de gobiernos del domingo era la primera reunión presencial de esa clase celebrada desde 2019. En principio se había programado en octubre, pero fue aplazada varias veces.
Los funcionarios celebraban el 60 aniversario del Tratado del Elíseo firmado por el presidente de Francia y líder de la resistencia antinazi de la II Guerra Mundial Charles de Gaulle, y el canciller de Alemania Occidental Konrad Adenauer el 22 de enero de 1963.