Una sacudida financiera estremeció a Wall Street luego de que el presidente de EE.UU., Donald Trump, anunciara ayer aranceles recíprocos, desatando un colapso en los mercados bursátiles.
Los futuros del Dow Jones se desplomaron un 2,7 %, los del S&P 500 un 3,9 % y los vinculados al NASDAQ 100 sufrieron una brutal caída del 4,7 %, según reportes de medios estadounidenses.
El impacto fue demoledor en el sector tecnológico. Apple lideró la debacle con un desplome del 6 %, una caída que se atribuye a los aranceles del 34 % impuestos a China, país clave en su cadena de suministro y de donde obtiene gran parte de sus ingresos.
Otras gigantes tampoco escaparon a la debacle. Nvidia—dependiente de la fabricación en Taiwán—perdió un 4 %, mientras que Tesla, la empresa de Elon Musk, se desplomó un 4,5 %. Las titanes del sector, Alphabet (Google), Amazon, Meta y Microsoft, también vieron disminuir su valor, generando una ola de pánico entre inversionistas.
Un choque de titanes con consecuencias impredecibles. Los aranceles de Trump han desatado un terremoto financiero que golpea directamente a las empresas más influyentes del mundo. Este choque comercial con China no solo eleva los costos de producción, sino que también reaviva los temores de una guerra económica de gran escala.
Si la tendencia a la baja se mantiene, podríamos estar ante el inicio de una crisis bursátil con efectos devastadores en la economía global. ¿Estamos presenciando el inicio de un nuevo capítulo de incertidumbre económica?
LRS
