REHOBOTH BEACH, Del. (AP) — El presidente Joe Biden y los líderes del Congreso probablemente reanudarán las conversaciones el martes en la Casa Blanca sobre el límite de la deuda , dijo el presidente el domingo, mientras la nación continúa acercándose a su autoridad legal de endeudamiento sin acuerdo. conocimiento.

Inicialmente, se suponía que la reunión sería el viernes, pero se pospuso abruptamente para que las conversaciones a nivel de personal pudieran continuar antes de que Biden y los cuatro líderes del Congreso se reunieran por segunda vez.

Funcionarios de la administración y del Congreso dijeron el domingo que no se ha concretado una reunión, aunque el martes era la opción más probable ya que Biden regresa a Washington el lunes y tiene previsto partir para la cumbre del Grupo de los 7 en Japón el miércoles.

Biden no detalló mucho progreso en las conversaciones, pero dijo que tenía la esperanza de que se pudiera llegar a un acuerdo con los republicanos para evitar lo que sería un incumplimiento de pago de deuda sin precedentes, que podría desencadenar una catástrofe financiera.

“Sigo siendo optimista porque soy un optimista innato”, dijo Biden a los periodistas mientras paseaba en bicicleta en Rehoboth Beach, Delaware. “Pero realmente creo que hay un deseo tanto de su parte como de la nuestra de llegar a un acuerdo. Creo que seremos capaces de hacerlo”.

Los asistentes dijeron que las conversaciones continuaron durante el fin de semana. Pero al menos públicamente, hubo pocos indicios de que la Casa Blanca o los republicanos de la Cámara se hubieran movido de sus posiciones iniciales.

Biden ha pedido a los legisladores que eliminen el límite de la deuda sin condiciones previas, advirtiendo que la autoridad de endeudamiento de la nación no debe usarse para imponer profundos recortes de gastos y otras demandas políticas conservadoras .

“Aún no hemos llegado al punto crítico”, dijo Biden a los periodistas el sábado antes de volar a su casa en la playa para pasar el fin de semana. “Hay una discusión real sobre algunos cambios que todos podríamos hacer. Todavía no hemos llegado”.

El presidente describió esa sesión del Despacho Oval como «productiva», aunque McCarthy dijo más tarde que «no vio ningún movimiento nuevo» para resolver el estancamiento. La Casa Blanca y los asesores del Congreso han estado en conversaciones desde el miércoles.

“El personal está muy comprometido. Calificaría el compromiso como serio, constructivo”, dijo Lael Brainard, directora del Consejo Económico Nacional de la Casa Blanca, en “Face the Nation” de CBS.

McCarthy ha insistido en usar la amenaza de no pagar las deudas de la nación para discutir cambios en los gastos, argumentando que el gobierno federal no puede seguir gastando dinero al ritmo actual. La deuda nacional asciende ahora a 31,4 billones de dólares.

Un aumento en el límite de la deuda no autorizaría nuevos gastos federales. Solo permitiría endeudarse para pagar lo que el Congreso ya ha aprobado.

El Departamento del Tesoro ha dicho que el gobierno podría agotar la capacidad de pagar sus facturas a partir del 1 de junio. La Oficina de Presupuesto del Congreso no partidista emitió una advertencia similar el viernes, diciendo que había un «riesgo significativo» de incumplimiento en algún momento de las dos primeras semanas del próximo mes.

Pero las estimaciones federales siguen cambiando.

La CBO señaló el viernes que si el flujo de efectivo en el Tesoro y las «medidas extraordinarias» que el departamento está usando ahora pueden continuar pagando las facturas hasta el 15 de junio, el gobierno probablemente pueda financiar sus operaciones hasta fines de julio.

 Eso se debe a que los ingresos fiscales esperados que llegarán a mediados de junio y otras medidas le darán al gobierno federal suficiente efectivo para al menos unas semanas más.

“En última instancia, lo que está en juego es que Estados Unidos nunca ha dejado de pagar su deuda”, dijo el domingo Wally Adeyemo, subsecretario del Tesoro, en “State of the Union” de CNN. “Y no podemos”.

Y el representante Michael McCaul, republicano por Texas, le dijo al programa “This Week” de ABC: “Creo que el incumplimiento no es el camino correcto a seguir. Así que soy un eterno optimista.”

Agregó: “Este es siempre un juego que jugamos, cada Congreso, ya sabes, desafiándonos unos a otros a saltar del acantilado. Es un juego peligroso”.