PUERTO PRINCIPE.- La Red Nacional para la Defensa de los Derechos Humanos en Haití (RNDDHH) ha denunciado que al menos 70 personas han muerto por la violencia de las bandas criminales de Haití desde principios de este mes, la mayoría en el barrio de Carrefour-Feuilles, en Puerto Príncipe.
En su último balance, la oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de Naciones Unidas estima que la ola de violencia de las bandas criminales en Haití ha dejado al menos 2.439 muertos, 902 heridos y 951 secuestrados desde el 1 de enero al 15 de agosto de este año.
Allí, una ola de violencia desatada por la pandilla de Gran Ravin ha dejado ya 54 fallecidos — frente a 20 de balances previos — en uno de los episodios más sangrientos desde que los grupos criminales asumieran el control de buena parte de la capital aprovechando el vacío de poder dejado con el asesinato en 2021 del entonces presidente del país, Jovenel Moise.
En su comunicado de condena, la ONG denuncia»la complicidad»exhibida por el Consejo Nacional Superior de Policía «y la cínica inercia» de las autoridades policiales que se han «exhibido con cinismo ante la cara de una población desamparada y a merced de las bandas armadas», recoge Alter Presse.
Los primeros tiroteos en Carrefour-Feuilles empezaron durante la tarde del pasado domingo pero no fue hasta la madrugada del lunes que la población comenzó a escapar de sus hogares en medio de súplicas de auxilio a la Policía haitiana. De hecho, los vecinos del barrio llegaron incluso a concentrarse al día siguiente para pedir ayuda a las autoridades en un último intento para conservar sus hogares.
Sin embargo, a lo largo de los tres días siguientes la banda liderada por Renel Destina, alias ‘Ti Lapli’ –de 42 años y buscado por el FBI tras secuestrar hace dos años a un ciudadano estadounidense– acabó lanzando una última ofensiva que le ha llevado apoderarse del barrio entero «a tiro limpio en la cabeza», según los residentes.
La violencia de las últimas semanas también se ha concentrado en Artibonite, en el norte de Haití, particularmente en los bastiones que tienen allí las bandas criminales, envueltas en guerras internas desde su consolidación en el país.
«El escenario es el mismo: se activan bandas armadas para mantener un clima de terror en el país, matando ciudadanos, hiriendo a otros y llevando a miles de familias a huir, abandonando sus casas y todo lo que poseen», denuncia la RNDDHH.70