REFLEXIONANDO DESDE MI CURUL –
Rememoramos con afecto al fallecido vicepresidente y presidente dominicano (41 días), de finales de los 80s.
Carismático líder Jacobo Majluta y recuerdo que en una de las visitas que nos hizo para ser entrevistado en el teleperiódico Realidades, cuyo estudio de grabación y edición estaba en nuestro apartamento de Manhattan, le cautivó el aroma que despedía el té de jengibre, especias y hojas aromáticas y me preguntó si podía entrar a la cocina para servirse él mismo, a lo que mi hijo Manuel Esteban Fernández (Jr) le respondió, «yo te llevo», le enseñó la bandeja con las tazas y teteras dispuestas sobre el mostrador y cuando tomaba la azucarera le dijo: «Ponle miel, que mami dice que cura la gripe».
Una vez sentado en la sala estudio con su taza ya casi vacía notó que Junior lo miraba fijamente (tendría unos cinco ó seis años) y le preguntó si le permitía fumar un cigarrillo, a lo que este contestó: «no tío, porque puedo sangrar por la nariz yo; y no quiero que te mueras tú».
Parecería una anécdota, pero creo que esto prueba la carismática franqueza y bondad que proyectó siempre nuestro inolvidable dominicano ilustre, el hecho de que mi hijo lo calificara de tío significa la simpatía que le generó, porque así le decía a los colegas míos, (periodistas y locutores y a los de Esteban, abogados, siguiendo nuestras tradiciones en dominicana, que hasta a los vecinos respetábanos, califiábamos de tíos y tías y tenían derecho de llamarnos la atención y hasta a amenazarlos con la correa o chancleta por alguna causa justificada)
Gracias al apreciado colega y amigo Alejandro Almanzar por recordarno
Un protagonista de nuestra historia Dominicana