COLOMBIA.- Gustavo Petro, proclamó la noche de este viernes que las reformas sociales de su Gobierno no son un «capricho», sino una necesidad, por lo que pidió al pueblo que se movilice para que el Congreso las apruebe.
«Las reformas sociales de este Gobierno no son un capricho individual ni de unos pocos, son una necesidad histórica. Una necesidad con la que este Gobierno y yo, en particular, estamos comprometidos», aseguró en la Casa de Nariño.
El presidente de Colombia reconoció que habrá más oposición en la medida que avance su Gobierno, por lo que aseguró que «el cambio final depende de los pueblos» y «de todas las familias colombianas».
«Nosotros iremos hasta donde el pueblo colombiano quiera y hasta donde el pueblo colombiano decida movilizarse en pro de las transformaciones sociales», sostuvo, recalcando el compromiso de su Gobierno con lograr un cambio.
«El cambio es necesario. Porque, aunque tenemos riquezas, recursos y hemos logrado algunos avances, todavía vivimos en un país donde en cientos de municipios no hay salud. Vivimos en un país donde miles de viejos no tienen pensión y mueren en las calles. Vivimos en un país que debe seguir en búsqueda de una prosperidad que llegue para todos y todas, sin distinción», lamentó.
Asimismo, cuestionó a quienes rechazan las reformas «sin abrir el debate de su necesidad» y llamó a construirlas entre todos.
«¿Por qué algunos se oponen sin preguntarles a quienes llevan años esperando por servicios públicos de calidad? […] ¿Por qué no unirnos todos los sectores y poderes del Estado para luchar contra la corrupción y para velar por la seguridad y la vida digna para todos los colombianos y todas las colombianas?», preguntó.
El mandatario hizo un recuento de sus nueve meses al frente del Gobierno, en los que, según dijo, «se han puesto en debate las reformas para lograr el cambio».
«Dijimos en campaña que para alcanzar la paz y una democracia más profunda necesitábamos de dos pilares fundamentales: la Justicia Social y la Justicia Ambiental», recordó.
En lo que se refiere a transformación social, resaltó que el objetivo de su Gobierno es la prosperidad para las familias colombianas, por lo que resulta «imprescindible» tanto «el crecimiento económico», como «detener el crecimiento de precios en los alimentos y los servicios públicos».
Sobre los retos económicos, aseguró que el país aún crece, «a pesar de la política del Banco de la República de aumentar las tasas de interés». En este sentido, instó a la banca privada a reducir «al máximo sus tasas de intermediación en los créditos para el sector productivo, incluido el de vivienda».
En la cuestión ambiental, indicó que Colombia se ha «convertido en vanguardia mundial de la lucha contra la crisis climática» y recalcó que «empiezan a andar los procesos de transición energética, de ampliar las energías limpias y de revitalizar la selva amazónica».
«Mi único temor es fallarles y no poder cumplir con los sueños y la esperanza que muchas familias colombianas han depositado en este Gobierno», concluyó.