-Cae «patrulla binacional»: Oficial del ERD y raso policial atrapados transportando haitianos indocumentados en San Juan-
Por Luis Rodríguez Salcedo
San Juan de la Maguana .- La frontera sur vuelve a hacer sonar las alarmas, esta vez no por el cruce masivo de indocumentados, sino por quiénes los llevaban: nada menos que un segundo teniente del Ejército de República Dominicana (ERD) y un raso de la Policía Nacional, quienes, en operativos separados, fueron sorprendidos mientras transportaban ciudadanos haitianos en situación migratoria irregular.
El primero en caer fue el segundo teniente Rubén Darío Vicioso Roa, quien conducía una yipeta Mazda CX9, color marrón y con placa G246235. Fue detenido por una patrulla militar en el tramo Las Matas–San Juan, justo a la altura del sector El Corbano. A bordo lo acompañaba una mujer haitiana sin un solo papel que justificara su presencia en el país.
Cuando se le cuestionó, el oficial intentó salir airoso declarando que se trataba de su “esposa”. La dama, con aparente complicidad o cortesía, respaldó la historia… al menos por unos minutos. Bastaron unas cuantas preguntas adicionales para que la verdad saliera a flote: ni boda, ni amor, ni relación. Simplemente, la mujer había abordado el vehículo poco antes del encuentro con los militares.
En otro escenario, esta vez a cargo de otra unidad del Ejército República Dominicana, fue detenido el raso César Sánchez Matos, quien viajaba tranquilamente en un Honda Civic rojo, placa AA03880, acompañado de un ciudadano haitiano que, para empeorar las cosas, presentó una cédula dominicana falsa.
El documento, que rezaba el nombre Mayki Romulis con el número 402-5596261-2, no aguantó la mínima revisión. Al ser depurado en la Fortaleza General José María Cabral, se descubrió que el papel era más falso que promesa en campaña. Además, como era de esperarse, el extranjero también se encontraba en el país sin la documentación correspondiente.
Ambos ciudadanos haitianos serán entregados a la Dirección General de Migración, que ya prepara su repatriación. En cuanto a los agentes dominicanos, el uniforme no les servirá de escudo: serán puestos a disposición del Ministerio Público para que respondan por sus actos ante la justicia.
Como dice el refrán: «No hay peor cuña que la del mismo palo». Esta vez, la ley se topó con los que juraron defenderla.
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