SANTO DOMINGO.- La Policía Nacional identificó ayer a dos dominicanos y cinco haitianos como autores del múltiple crimen ocurrido en el sector Aminilla, Dajabón, el pasado lunes, en el que cuatro personas de una familia fueron asesinadas.
Diego Pesqueira, portavoz de la policia comunicó que agentes mataron a David Cruz Jiménez, de 38 años, cabecilla de los malhechores, y los haitianos Watson Delicier, de 30, y Maken Pierre, de 23.
Cruz Jiménez cayó abatido la madrugada de este miércoles en Santa Cruz Monte Cristi y Pierre el pasado martes, en El Pocito, Dajabón, municipio donde ocurrieron los asesinatos.
Los detenidos son Adonis José Morillo, de 24 años, señalado por las autoridades como encargado de ubicar las propiedades para asaltarlas y conductor del vehículo ocupado por los investigadores.
Con relación a los haitianos, Frandy Lumenes, de 30 años, Maxos Olus, de 38, Pacheco Beltrán, de 53, quien, según el informe oficial, disparó a las víctimas.
Durante los operativos fueron ocupadas tres armas de fuego, siendo una de estas, propiedad de los fallecidos, un vehículo, una motocicleta y otros artículos.
Pesqueira estableció que el motivo del homicidio registrado el pasado lunes fue para hurtar pertenencias personales y artefactos materiales de la familia, conforme indican las pesquisas.
El vocero de la Policía reveló que este grupo criminal se dedica a ubicar fincas, viviendas y negocios, para cometer robos portando armas de fuego y fabricación artesanal “chilena/chagón”.
Especificó que los delincuentes habían ejecutado otros actos delictivos en Cotuí, La Vega, Bonao, Santiago y Dajabón.
Manifestó que aún no se ha determinado si los criminales tienen vinculación con bandas peligrosas ubicadas en Haití.
El pasado lunes, fallecieron Ramón Eugenio Medina (Papito), de 60 años, su esposa Carmelina Antonio Cabreja Ramos, de 49, y su hijo Daniel Medina Cabreja, de 19, a manos de los criminales.
Con relación a la otra persona ejecutada, los médicos legistas continúan analizando el cuerpo para identificarlo. En tanto, Cristián de Jesús López Cabreja, de 25 años, fue el único sobreviviente y se encuentra gravemente herido en un hospital de Santiago Rodríguez.
Para los comunitarios de Aminilla esto representa un gran malestar, ya que es el segundo caso registrado en los últimos días.
El pasado mes, haitianos lesionaron a tres personas y mataron un hombre para asaltarlos a tan solo 10 kilómetros de donde sucedió el asesinato del pasado lunes.
Familiares de las víctimas y residentes de la demarcación notificaron a las autoridades que expulsarán a haitianos que sean indocumentados. Además, el alcalde de la comarca, Santiago Riverón, solicitó crear un comando militar con el objetivo de patrullar y enfrentar a “bandas de haitianos que cruzan la frontera para efectuar crímenes y robos”.
Cruz Jiménez, uno de los presuntos autores del cuádruple homicidio, quien cayó abatido en la madrugada del miércoles en un intercambio de disparos con la Policía Nacional, había sido procesado el año anterior.
Había sido apresado en julio 18 del 2022 conjuntamente con otra persona no identificada, ambos acusados del robo de 41 ovinos en el sector Loma de Castañuelas, en Monte Cristi.
El hecho ocurrió el 5 de julio del 2022 en perjuicio de la señora Argentina García Ureña.
La información también es corroborada por la magistrada Yeisin Alcántara Ciprián, procuradora fiscal de Dajabón, quien indicó a periodistas del Listín Diario que el hoy occiso contaba con una sentencia judicial.
Tras los últimos operativos por parte de las autoridades la cifra de privados de libertad asciende a 4, luego de que fueran arrestados dos haitianos y un dominicano, quienes son vinculados al crimen y cuyas identidades son desconocidas.
Hasta el momento, solo a uno de ellos se les conocerá medida de coerción, luego de que el Ministerio Público depositara el expediente acusatorio a las 10:41 de la mañana de este miércoles.
El Centro Educativo José Francisco Herrera, ubicado en la comunidad de La Gorra, en Dajabón, despachó a los estudiantes de nacionalidad haitiana con el fin de evitar altercados a raíz del asesinato de una familia en la localidad.
Ante la situación, agentes de la Policía Nacional y del Ejército tuvieron que intervenir en el centro educativo para evitar que familiares y amigos de la familia asesinada tomara represalias en contra de los extranjeros, por lo cual tuvieron que escoltar a los estudiantes y llevarlos a sus respectivos hogares.
Según informaciones, los moradores de La Gorra se encontraban con armas de fuego y blancas, lo que provocó que maestros llamaran a la Policía por temor a que turbas agredieran a los menores haitianos.
