El Gobierno de Brasil ha expresado su intención de solicitar explicaciones a las autoridades estadounidenses por el trato «degradante» recibido por ciudadanos brasileños deportados desde Estados Unidos.
En un vuelo reciente, los deportados llegaron a Brasil esposados y denunciaron maltrato durante el trayecto. El avión, que transportaba a 88 brasileños, 16 agentes de seguridad estadounidenses y ocho miembros de la tripulación, tenía como destino Belo Horizonte, pero realizó una escala no programada en Manaos debido a problemas técnicos.
En Manaos, las autoridades brasileñas ordenaron la retirada de las esposas y, por instrucción del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, los deportados fueron trasladados en un avión de la Fuerza Aérea Brasileña para completar su viaje de manera digna y segura.
Este incidente es el segundo vuelo de deportación desde Estados Unidos a Brasil en lo que va del año y el primero desde la toma de posesión del presidente Donald Trump. Hasta el momento, las autoridades estadounidenses no han emitido comentarios al respecto.