WASHINGTON (AP) — La economía estadounidense se expandió a un ritmo anual de 2,1% de abril a junio, mostrando una resiliencia continua frente a mayores costos de endeudamiento para consumidores y empresas, dijo el gobierno el miércoles en una rebaja de su estimación inicial.
El gobierno había estimado previamente que la economía se expandió a una tasa anual del 2,4% el último trimestre .
La segunda estimación de crecimiento del Departamento de Comercio del último trimestre marcó una ligera aceleración desde una tasa de crecimiento anual del 2% de enero a marzo. Aunque la economía se ha visto desacelerada por el arduo esfuerzo de la Reserva Federal para controlar la inflación con aumentos de las tasas de interés, ha logrado seguir expandiéndose, mientras los empleadores siguen contratando y los consumidores siguen gastando.
El informe del miércoles sobre el producto interno bruto del país (la producción total de bienes y servicios) mostró que el crecimiento del último trimestre fue impulsado por aumentos en el gasto de los consumidores, la inversión empresarial y los desembolsos de los gobiernos estatales y locales. Una medida de los precios al consumidor en el informe también mostró un enfriamiento de la inflación, lo que podría aliviar la presión sobre la Reserva Federal para que suba aún más las tasas de interés.
«Un menor crecimiento y aumentos más débiles de los precios son buenas noticias para la Reserva Federal», dijo Eugenio Alemán, economista jefe de Raymond James.
El gasto del consumidor, que representa alrededor del 70% de la economía estadounidense, aumentó a un ritmo anual del 1,7% en el trimestre abril-junio, un aumento decente, aunque inferior al 4,2% en los primeros tres meses de 2023. Excluida la vivienda, la inversión empresarial aumentó a una fuerte tasa anual del 6,1% el último trimestre. La inversión en vivienda, afectada por el aumento de las tasas hipotecarias, cayó en el segundo trimestre.
La economía estadounidense, la más grande del mundo, ha demostrado ser sorprendentemente duradera en medio de la agresiva campaña de la Reserva Federal para acabar con el resurgimiento de la inflación, que el año pasado alcanzó un máximo de cuatro décadas. Desde marzo del año pasado, la Reserva Federal ha elevado su tasa de referencia 11 veces, encareciendo mucho el endeudamiento para todo, desde automóviles hasta viviendas y expansiones comerciales, y provocando predicciones generalizadas de una próxima recesión.
Desde que alcanzó un máximo del 9,1% en junio de 2022, la inflación interanual ha caído de manera más o menos constante. El mes pasado, llegó al 3,2% , una mejora significativa aunque todavía por encima del objetivo de inflación del 2% de la Reserva Federal. Excluyendo los costos volátiles de los alimentos y la energía, la llamada inflación subyacente en julio igualó el aumento mensual más pequeño en casi dos años .
Una medida de los precios en el informe del PIB, el índice de gastos de consumo personal, aumentó a una tasa anual del 2,5% el último trimestre, frente a un ritmo del 4,1% en el trimestre enero-marzo y el menor aumento desde finales de 2020.
Desde que la Reserva Federal comenzó a subir las tasas, la economía se ha visto impulsada por un mercado laboral consistentemente saludable. Los empleadores han agregado un promedio sólido de 258.000 empleos por mes este año, aunque ese promedio se ha desacelerado en los últimos tres meses a 218.000.
El martes, un informe del gobierno se sumó a la evidencia de que el mercado laboral se está debilitando gradualmente: mostró que los empleadores publicaron muchas menos ofertas de trabajo en julio y que el número de personas que renunciaron a sus empleos cayó por segundo mes consecutivo. (Cuando menos personas renuncian a sus trabajos, generalmente sugiere que no tienen tanta confianza en encontrar uno nuevo).
Aun así, las ofertas de empleo siguen estando muy por encima de sus niveles previos a la pandemia. La tasa de desempleo del país, del 3,5%, todavía está apenas por encima del nivel más bajo en media década. Y cuando el gobierno publique el viernes el informe de empleo de agosto, los economistas encuestados por la firma de datos FactSet creen que mostrará que, si bien la contratación se desaceleró, los empleadores aún agregaron 170.000 puestos de trabajo.
La combinación de una inflación desplomada, un crecimiento económico continuo y una contratación más lenta pero constante ha generado esperanzas de un inusual «aterrizaje suave». Se trata de un escenario en el que la Reserva Federal logra vencer la inflación elevada sin provocar una recesión dolorosa.
Al informe del gobierno del miércoles, la segunda de tres estimaciones sobre el crecimiento del último trimestre, le seguirá un cálculo final a finales del próximo mes.
